El mundo de la perfumería nunca deja de sorprendernos con innovaciones y tendencias que transforman la manera en que percibimos y experimentamos los aromas. En esta ocasión, el café se alza como un ingrediente estrella en la creación de fragancias, desencadenando una nueva moda olfativa que busca estimular nuestros sentidos de una manera única.
La versatilidad, los matices profundos y el carácter adictivo del café lo convierten en un componente esencial para las fragancias que desean dejar una impresión duradera.
¿Estás lista para llevar esta tendencia a tu piel?
Los perfumes que incorporan notas de café están tomando el centro del escenario en los lanzamientos aromáticos de la temporada. Si bien el café no es un ingrediente nuevo en la perfumería, promete ganar un lugar destacado una vez más. Las señales son claras: basta con mencionar que en el Concurso Internacional de Perfumería Mouillette d’Argent 2023, el perfumista Sebastien Lacouture, de Scentmate by dsm-Firmenich, recibió el premio al mejor perfume en la categoría general por su creación «Bergamotte Torrefiee». A pesar de que parecía que las fragancias con bergamota ganarían protagonismo, nos encaminamos hacia un reinado inminente de los caldos gourmand.
La familia olfativa gourmand se caracteriza por resaltar aromas cálidos y dulces que a menudo se complementan con matices especiados. En esta categoría, triunfan notas como la vainilla, el chocolate, el caramelo y, por supuesto, el café. ¿Te resulta familiar la relación entre el café y los perfumes? El café es conocido por ser el remedio ideal para la «fatiga olfativa o ceguera nasal». Hanna Lambert, Scent Librarian en Scentmate by dsm-Firmenich, nos explica que cuando se prueban continuamente diferentes fragancias, los receptores olfativos se saturan, volviendo menos sensibles y dificultando la distinción precisa de los olores. En este punto, el café entra en escena, ya que «sus aromas fuertes pueden actuar como un contrapunto a las fragancias que se prueban, permitiendo distinguir y apreciar las sutilezas de las opciones disponibles».
Pero, ¿qué aporta el café a una fragancia? Según la experta, el café es un ingrediente fascinante debido a sus notas amargas y tostadas, así como su delicioso matiz a chocolate. Ya sea utilizado como nota central o como elemento de apoyo, el café agrega una dimensión rica y aromática a las fragancias, haciéndolas más complejas y atractivas. Combina perfectamente con notas amaderadas, como el vetiver y el pachulí, así como con matices ambarinos. Al unirse a notas florales y combinarse con ingredientes golosos como la vainilla y el chocolate, puede dar como resultado fragancias que recuerdan a exquisitos postres.
El proceso de capturar el aroma del café requiere la técnica de extracción con fluidos supercríticos, que aprovecha las propiedades especiales del dióxido de carbono en su punto crítico (presión de 73 bares y temperatura de 30°C) para preservar la identidad del perfil natural del café. Este ingrediente se popularizó con el lanzamiento de la fragancia floral ambarina «Black Opium» de Yves Saint Laurent en 2014, donde el café desempeñó un papel adictivo.
En 2018, surgió «Awake» de Akro Parfums, creada por el destacado perfumista Olivier Cresp de Firmenich, considerado «el rey de las notas golosas». Esta fragancia retrata la nota del café en su estado más puro: tostado, goloso y casi animal.
El café es un ingrediente universal que puede añadir emoción a las fragancias con su intrigante contraste frente a las notas florales en los perfumes tradicionalmente femeninos o complementar las notas coriáceas y masculinas. El café, con su irresistible aroma, ha llegado para conquistar el mundo de la perfumería y despertar nuestros sentidos de una manera excepcional.